La
famosa tomatina española siempre da la vuelta al mundo y uno se
sorprende con esa gente que se arroja tomates queda bien colorada.
Bueno, algo similar pero con otro color sucede en Italia. La Batalla de
las Naranjas que tiene lugar en la ciudad norteña de Ivrea.
La
batalla de las naranjas de Ivrea reúne a miles de personas y hay en
total nueve equipos que se arrojan naranjas entre sí con mucha violencia
los días del carnaval, en febrero. La fiesta termina con un funeral
enorme y solemne que incluye una marcha silenciosa que cierra el
carnaval.
Una de las chicas de la ciudad es elegida como la dama en apuros de la historia, la hija del molinero. Ella desfila en una carroza con guardias y los equipos se encargan de arrojar las naranjas que aparecen en escena recién en el siglo XIX pues antes eran judías y después manzanas. Y eso que las naranjas no se cultivan en la zona y deben ser traídas de Sicilia.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario